Al hablar de Dominación virtual, en un principio, todos tendemos a poner una mueca despectiva o burlona ante esas palabras para alegar que no es algo tangible, que no estamos de acuerdo con ello o también que no es lo mismo y no sirve para nada. Pero los invito a reflexionar un poquito…
A mí, internet me ha servido y sirve para conocer gente que de otro modo jamás tendría la oportunidad de conocer, comenzando en el plano vainilla, en el cual todos en algún momento hemos entablado una relación amistosa e, incluso, afectiva con alguien que se encuentra lejos de nuestra ciudad de origen o ni siquiera se encuentra en este país. Esto me hace preguntarles: ¿creen que esos lazos sean auténticos? ¿Que sean verdaderamente consideradas amistades reales? ¿O sentimientos reales? Yo puedo responder que sí. Incluso me atrevo a decir que he llegado a desarrollar relaciones afectivas realmente fuertes con personas que ni siquiera he visto jamás, ni a través de una cámara, sino mediante chats. Aunque no estoy hablando de Dominación en este caso, sino de amistad.
Debido a esto, yo, en lo personal, he tenido experiencia al llevar a cabo este tipo de relaciones dentro del BDSM durante aproximadamente un año y medio, lo cual luego transporté al ámbito real, sin dejar de practicar en lo virtual.
¿Quién no ha usado un medio de comunicación para acercarse a alguna persona en particular e, incluso, lo ha usado como una introducción al BDSM, ya que muchos, cuando iniciamos en esto, ya sea por miedo o desconocimiento total, preferimos mantenernos “a salvo” tras un monitor o pantalla?
Hace algunos años yo aún no estaba dentro del BDSM, pero ya existían chats específicos donde Dominantes y sumisas podían conocerse e incluso llevar todo ello al mundo real. En este tiempo, esos chats han desaparecido, sin embargo con el uso de Facebook se ha logrado utilizar esta herramienta con el mismo fin.
Internet me parece un fantástico medio para esas primeras formas de contacto, de conocerse, explorarse, incluso coquetear y hasta transmitir. Pero eso no lo es todo, es tan solo un paso inicial, lo real, verdadero, viene cara a cara (hablo siempre bajo mi punto de vista, por supuesto). Personalmente también creo en las sensaciones en directo y nada puede sustituir a los sentidos (o la privación de ellos): olor, sabor, tacto, sonido… cosas que a través de una pantalla son imposibles de transmitir, pero en muchas ocasiones las sensaciones pueden ser más intensas, a pesar de no recibir caricia alguna.
El recurso de las herramientas virtuales y de comunicación, hemos de verlo siempre como un medio para la apertura y el acercamiento hacia algo que, de cajón, nos crea incertidumbre, miedo o inquietud y, en algunos casos, como un fin para lograr lo que se busca. Estoy totalmente de acuerdo con que es uno de los mejores medios que se pueden utilizar para conocernos y crear lazos afectivos que de otro modo serían imposibles.
Digamos también que la Dominación virtual no es para todos y tampoco es considerada una relación real, por lo tanto, quien guste iniciar en ello inténtelo y quien de plano no crea que sea algo satisfactorio para él ni lo haga o caerá en la frustración total.
Los sentimientos que se crean a través de las relaciones virtuales son más intensos, desarrollando un afecto tan real y tan vívido como cualquiera.
Llámalo idealización, admiración, evasión o una manera de dar paso a lo que se venga después. No todas las relaciones virtuales resultan en un plano real, ya que, como en todo, puedes encontrar gente con intenciones de causar daño, pseudo sumisas y también pseudo dominantes, por lo cual siempre hay que estar atentos a cualquier signo de abuso, intimidación y acción que nos incomode o nos cause alerta.
Mantén siempre tu perfil privado, no reveles información personal al primero que te diga que quiere conocerte, entrenarte o guiarte. Normalmente estos recursos los usan para poder acceder y manipularte; deja claro qué buscas, qué esperas y siempre sé honesto, pues al final es tiempo que estás invirtiendo en entablar una conversación y futura relación como para perderlo.
Déjate llevar: si es tu manera de vivir el BDSM, adelante. Normalmente, la mayoría inicia de ese modo por el miedo al rechazo, o simplemente porque no busca nada más que eso, y se vale. Dentro de estas relaciones también existen los límites y lo consensuado, que puede ir desde la limitación en la vida personal y horarios de contacto, como en el intercambio de materiales, fotos, videos, audios, cam, etc.
Si la relación llega al grado de interactuar por medio de cam, utiliza el modo de grabación mutua, así, si cualquier pseudo intenta manipularte, tú también tienes armas para defenderte, al igual que las capturas de pantallas y respaldos de conversaciones para mantener todo registrado.
Los pros y contras:
Veamos lo turbio y lo “romántico” de estas relaciones. Como bien saben y sucede con todo, hay un lado bueno y uno malo que debes estar consciente de conocer, principalmente porque esto es un medio en el cual se pueden utilizar recursos como cámaras, celulares y redes sociales para interactuar.
Primero: debe existir una absoluta confianza en la persona con la que desean entablar una relación así. ¿A qué me refiero? A que no de buenas a primeras soltemos información o datos que después puedan servir en nuestra contra y aún con dicha confianza pueden llegar a pasar eventos desagradables.
Date el tiempo de conocer bien a la persona, platica, interactúa pero no accedas a las primeras de cambio, pues hay personas, sobre todo gente con mala leche, que usan este medio para engañar, manipular y, en definitiva, anular psicológicamente a inocentes víctimas que anhelan una relación BDSM aunque sea por este medio.
¿Cómo lo logran? Pues utilizando esta misma ansia e inexperiencia en una relación BDSM y porque, muchas veces, son expertos en el uso de las palabras. Existe el peligro inminente de caer en algún tipo de extorsión o difamación, así que sean prudentes en el aspecto del comienzo de uso de video llamadas y fotografías; no muestren su rostro y si lo hacen traten de no estar realizando nada que los comprometa.
Lo bueno:
El realizar estas interacciones no sustituye a lo real, nunca lo hará, pero hay a quienes nos llena, nos complace y nos gusta esto, pues tampoco por no ver deja de ser real lo que yo pueda sentir, puede ser tan real incluso sin tener delante a la persona.
Se llegan a crear vínculos afectivos tan reales, intensos y fuertes como en una relación real. Sí. Y también a muchos los mantiene en la seguridad antes de aventarse a la experiencia real y éste es sólo un medio que da más facilidad a adquirir ciertos conocimientos y experiencias. Es un medio más de llegar a esa sumisa que está lejos de mí y de reforzar nuestra confianza, pues quién no ha utilizado mensajes de texto para ordenar, para saber cómo se encuentra la otra parte y habemos sumisas que estamos totalmente satisfechas con la Dominación que ejerce dicho Dom virtual.
Es posible hacer muchas cosas muy interesantes a través de la dominación virtual, también es una herramienta poderosa en las relaciones en las que la distancia es un factor relevante.
Una relación virtual puede ser perfecta, puesto que muchas veces es lo más cómodo para las partes. La vida privada está claro que tiene una gran influencia así como el trabajo, el lugar de residencia y algunas cosas más. También son dignas de mencionar la seguridad y la protección que puede dar la pantalla de cristal que te aparta de “todo mal”.
Para comenzar una relación real, lo principal y primordial es la confianza, la coincidencia en gustos similares, conocer a las personas y este medio te da la tranquilidad de presentarte a la gente como eres, sin miedo a un posible defecto físico, a la timidez, a perder el tiempo sin estar seguro de la conveniencia con la otra persona. Te permite tener mucha discreción para poder compatibilizar esta necesidad o deseo con tu familia, entorno o, simplemente, mantener privado ese aspecto de todo el mundo.
Lo malo:
Las interacciones electrónicas son IGUALES a las del “mundo real” en varias cosas. Aunque una ciber-sesión o una discusión no te dejen moretones ni marcas, sí pueden afectar tus emociones y relaciones de la misma manera y en muchos sentidos que lo haría el juego en el “mundo real”.
Las aptitudes que vas aprendiendo, como negociar qué quieres, poner límites, conocer a la persona Dominante antes de jugar con ella, ir despacio, hacer controles después de la sesión, etc, son IGUAL de necesarias cuando la sesión sucede en un monitor como cuando suceden en un calabozo.
Hemos oído muchas historias tristes de personas dominadas que pensaban que no tenían que tener un cuidado especial porque jugaban virtualmente, para descubrir que no era así y se sorprendieron de sentirse tan usadas, tristes, ignoradas o, en general, pisoteadas.
El juego virtual les permite a los participantes conectar y “reflejar” mutuamente sus fantasías, produciendo un feedback continuo especialmente intenso que no se da en el “mundo real”.
La razón para poner “mundo real” entre comillas es porque en muchos sentidos el juego ciber ES REAL: la fantasía compartida es una fantasía real y la respuesta psicológica de tu cuerpo es muy, muy real, con lo que en algunos sentidos, aunque no todos, el universo que tú creas en tu cabeza y muestras a través de tu teclado y monitor es tan real como el espacio que estás ocupando ahora.
Mucha de la gente jugando en internet TIENE POCA O NINGUNA EXPERIENCIA REAL EN BDSM.
Esta ausencia de “reality checks” (test en la vida real) a veces hace que les resulte fácil quedar atrapados de manera poco realista en sus propios roles, interpretando el papel de la persona Dominante ultra controladora y arrogante, o la persona sumisa que se arrastra y se somete de manera servil, sin pensar en las necesidades y límites reales de ellas mismas o sus compañeros.
Una de las malas cosas de internet es la ausencia de responsabilidad y compromiso en muchos casos: Internet te permite jugar, cuando quieres, con la posibilidad de que tus acciones no se lleguen a conectar nunca con tu “yo real”. La gente con buena intención usa eso para explorar roles, situaciones, gustos, ir aprendiendo y tomando confianza. También hay personas que a lo mejor les dan miedo o resultan demasiado irreales o embarazosas sus fantasías como para vivirlas en la realidad. O directamente sus realidades personales le impiden otro tipo de realización.
Lo importante, sea cual sea el caso, es ser honestos y claros con el futuro o posible compañero de juegos. La gente con mala intención puede usarlo para acosarte, amenazarte, insultarte, mentir a la gente sobre ti o revelar tu información sin que tú hayas dado permiso.
Nuestro consejo es que tengas tanto cuidado al buscar compañeros online como lo harías en la vida real y ten especial cuidado con la información que compartes, como tu nombre, lugar de residencia o situación en tu vida, al menos que no tengas problema con que el mundo entero lo sepa.
Ventajas y aplicaciones:
Puedes formar parte del seguimiento, educación y control de una sumisa. Si eres amante del control, éste es un medio que también puedes utilizar en tu relación real y así mantener la “vigilancia” e interacción con tu sumisa o Dom en todo momento.
Vívelo, siéntelo, gózalo, escríbelo, léelo sobre todo si es algo que te gusta.